TRIGÉSIMA
CUMBRE DE PRESIDENTES DEL MERCOSUR
Contexto de la Cumbre
La cumbre de Presidentes
se desarrolló los días 20
y 21 de julio en la ciudad de Córdoba,
con un marco nacional, regional y mundial
signado por múltiples conflictos.
Por un lado, el Presidente de Uruguay,
Tabaré Vasquez días previos
a iniciar la Cumbre, citó a líderes
de la oposición para fijar posición
ante una probable reunión con su
par argentino respecto a la instalación
de dos pasteras en Fray Bentos. Dicho
conflicto no figura en la agenda oficial
ya que es considerado un asunto bilateral,
pero despierta uno de los puntos de mayor
expectativa.
Se recordará que en el mes de marzo
ambos presidentes tuvieron un encuentro
por este mismo tema cuando asistieron
a la asunción de la Presidenta
chilena Michelle Bachelet. En aquella
ocasión, se acordó una tregua
por 90 días que consistía
en levantar los cortes de ruta y suspender
la construcción de las papeleras.
Sin embargo, ni los asambleístas
ni los empresarios respetaron lo acordado
por sus respectivos mandatarios.
Luego, el tema fue presentado por Argentina
ante la Corte Internacional de Justicia
de La Haya. Una semana antes de dar comienzo
la Cumbre, La Haya rechazó la petición
argentina 14 votos contra uno. Esto hizo
que el conflicto se instalara nuevamente
a nivel diplomático.
La instalación de las plantas de
Fray Bentos son para Uruguay parte de
una política de desarrollo del
sector foresto industrial que se mantiene
en el tiempo y a pesar de los cambios
de signo político del país.
En contraste a esta continuidad, Argentina
y en particular, la administración
de Kirchner no cuenta con una política
sobre el tema. En este tiempo de mayor
conflicto, opinan los especialistas que
el Presidente estuvo por detrás
de los acontecimientos, ya sean los cortes
de ruta y de puentes que tuvieron lugar
en Gualeguaychú, en la medida cautelar
solicitada a La Haya o en el pedido de
no financiamiento a los organismos internacionales.
Durante los días de la Cumbre se
explicitó por parte del Presidente
uruguayo la oferta de control y monitoreo
conjunto sobre la contaminación
que las pasteras puedan originar.
Por su parte, el Presidente argentino
Kirchner viajó a Paraguay unos
días antes de dar comienzo la Cumbre,
según había trascendido
en fuentes periodísticas, para
condonar parte de la deuda que Paraguay
mantiene con el Ente Binacional Yacyretá.
También, para confirmar nuevas
inversiones para terminar las obras en
la represa hidroeléctrica.
En la agenda bilateral también
se incluye: la estructura organizacional
del Ente Binacional, la comercialización
de la energía eléctrica
y la adecuación al Protocolo ambiental
de Kyoto.
Argentina está interesada que en
el año 2008 la represa produzca
el 25% de la energía que consume
el país, lo que significa ampliar
en un 11% su producción actual.
Además del aporte energético
que se espera con la culminación
de la represa, para Paraguay es fundamental
la quita de la deuda de Yacyretá
para su proceso económico.
En la visita presidencial, quedó
establecido que la quita de la deuda a
Paraguay está condicionada al acuerdo
que sancionen ambos países en un
plazo no mayor detrás meses.
Kirchner y su par paraguayo, Duarte Frutos
firmaron un memorando reafirmando la viabilidad
del emprendimiento de Yacyretá,
expresando el deseo de culminación
aunque no se establecieron fechas a respecto.
A su vez, el mandatario argentino propuso
formar una comisión investigadora
para determinar responsables de actos
de corrupción que impidieron la
culminación de la obra. De la declaración
final, no consta que Argentina haya condonado
deudas paraguayas con el Ente Binacional.
A nivel internacional, se destacó
el encuentro del Grupo de los 8 (Alemania,
Canadá, EE.UU, Francia, Gran Bretaña,
Italia, Japón, y Rusia) que tuvo
lugar en la ciudad rusa de San Petersburgo,
el fin de semana previo a la Cumbre del
MERCOSUR.
Los miembros del G8 declararon su voluntad
de consenso sobre las principales condiciones
para la liberalización del comercio
mundial para el mes de agosto.
En otro orden de cosas, y urgido por los
acontecimientos en Oriente Medio, tuvo
como preocupación central proyectar
una imagen fuerte y consensuada sobre
ese conflicto, acordando una declaración
unánime a través de la cual
se exige el fin de todas las operaciones
militares y la liberación de los
soldados israelíes capturados.
También solicitó al Consejo
de Seguridad da la ONU que se considere
la posibilidad de una presencia internacional
con funciones de supervisión.
Aunque esta declaración, de alguna
manera esconde o disimula las diferencias
internas del G8 sobre la situación
de Oriente Medio. En tal sentido, es claro
el apoyo estadounidense a la postura israelí,
ya que culpa a Hizbollah y Hamas (movimiento
de resistencia islámica) de la
crisis. A la vez que rechaza el llamamiento
del primer ministro de El Líbano
para un inmediato alto el fuego, pues
EE.UU argumenta que Israel tiene derecho
a defenderse. Con una posición
diferente se ubican Francia y Rusia que
insisten en suspender las acciones bélicas
de Israel, pues consideran que ha hecho
un uso excesivo de las fuerzas en sus
acciones militares.
REUNIÓN DE COORDINADORES
Uno de los hechos sobresalientes
de la reunión de los coordinadores
fue el compromiso de Brasil de brindar
apoyo a los socios minoritarios del bloque.
Del gobierno brasileño surgió
el compromiso de apoyar a los socios minoritarios
del MERCOSUR para desarrollar políticas
regionales que fortalezcan las economías
de los países.
Esto puede encerrar importancia política,
ya que en los últimos tiempos tanto
Uruguay como Paraguay habían manifestado
públicamente sus dudas sobre su
permanencia en el bloque, pues expresaban
no recibir un tratamiento diferenciado.
La política de apoyo comenzó
durante la presidencia de Argentina, a
partir de la detección de proyectos
de integración productiva entre
los socios mayores y menores.
En tal sentido, el Canciller de Brasil
manifestó que uno de las tareas
prioritarias será la implementación
de un new deal, incluso con financiamiento
del Banco Nacional de Desarrollo de Brasil.
Además, para tratar de reducir
las asimetrías entre los países
miembros se propone el Fondo de Convergencia
Estructural cuyo propósito es promover
la competitividad y la cohesión
social. Actualmente, cuenta con un presupuesto
de cien millones de dólares, que
se distribuirán entre los países
miembros de una manera inversamente proporcional
a los aportes realizados.
Por su parte, Venezuela expresó
su voluntad de contribuir económicamente
con el Fondo de Convergencia Estructural.
(FOCEM)
También, se confirmó la
firma con Cuba de un acuerdo que consiste
en extender a los países del MERCOSUR
las preferencias arancelarias que Cuba
mantiene bilateralmente con cada uno de
los cinco países. Si bien el acuerdo
carece comercialmente de relevancia, desde
el punto de vista político, será
presentado por Cuba como otro quiebre
al bloqueo que desde hace años
le ha impuesto EE.UU. La Cancillería
argentina informó a medios periodísticos
que no hubo objeciones estadounidenses
a respecto.
Otro de los hechos más relevantes
fue la suspensión de la firma del
acuerdo de libre comercio con Israel debido
al conflicto bélico que por estos
días mantiene con El Líbano.
BALANCE DEL ENCUENTRO
En nuestra ciudad,
durante dos días de trabajo un
grupo de presidentes americanos buscó
una vez más, la integración
continental.
En la jornada inaugural, asistieron los
presidentes de Chile Michelle Bachelet,
de Paraguay Nicanor Duarte Frutos y de
Uruguay Tabaré Vasquez.
En calidad de anfitrión y de Presiden
del MERCOSUR, Kirchner habló de
fortificar el mercado y superar las diferencias.
Así, el propósito es avanzar
en una agenda común priorizando
la integridad regional desde la diversidad
y la pluralidad. También, dio la
bienvenida a la República Bolivariana
de Venezuela al integrarse como socio
pleno. El mandatario expresó que
“la integración regional
es el resultado de un proceso complejo,
largo y sinuoso en el que las tensiones
y las divergencias son inherentes para
las necesidades de intereses locales,
nacionales, regionales y globales, con
diferencias entre las partes”.
Es verdad que MERCOSUR se ha tratado de
un proyecto ambicioso que ha tenido marchas
y contramarchas. Pero al día de
hoy, es un sujeto de derecho público
internacional, a pesar de los muchos vacíos
y modificaciones necesarias en materia
jurídica e institucional. Además,
si lo hecho hasta ahora se pone en perspectiva,
y se contextualiza en relación
a marcos nacionales con múltiples
vaivenes, se aprecia una evolución
irregular, pero también es innegable
el largo camino realizado.
El MERCOSUR se ha caracterizado por grandes
gestos simbólicos, hecho que también
caracteriza a las reuniones cumbres en
general. La realizada en Córdoba,
al menos en un principio no parecía
ser la excepción a esto. Uno de
los gestos más significativos es
el debut de Venezuela como miembro pleno
del bloque regional. Su ingreso se produjo
en tiempo record, pues se propuso hace
seis meses atrás, en la Cumbre
de Montevideo.
Su inclusión representa fortalecimiento
del bloque a nivel geoeconómico
y geopolítico, a la vez que complementariedad
económica, ya que Venezuela es
la primera reserva de petróleo
de Sudamérica. Esto otorga poder
a la hora de negociar con otros bloques
comerciales. El ingreso de la República
Bolivariana de Venezuela multiplica por
cuatro el intercambio comercial con Argentina,
por tres con Brasil, por 3,4 con Chile
y por 2,2 con Uruguay, en un lapso no
superior a los tres años.
Es indudable que esto favorece fuertemente
la expansión y la consolidación
política del MERCOSUR. Asimismo,
el bloque ha tomado impulso gracias a
la fuerte preocupación sobre la
integración social, lo cual se
ha visto favorecido por las coincidencias
políticas de los gobiernos de la
región, luego de una década
de gobiernos neoliberales.
La idea es unificar criterios en materia
educativa, sanitaria y alimenticia, ya
que esto es visto como una posibilidad
de concreción de los acuerdos a
nivel macroestructural, pues de este modo
se logra el apoyo de las poblaciones locales.
También, puede interpretarse que
la llegada venezolana genera una debilidad
más de la Comunidad Andina de Naciones.
Sólo el tiempo y el devenir de
los acontecimientos echará luz
sobre el futuro de la CAN.
Como respuesta ante los históricos
reclamos de Paraguay y Uruguay desde su
condición de socios menores, al
término de las reuniones del Consejo
del Mercado Común (integrado por
los ministros de Economía y de
Relaciones Exteriores), se asumió
el compromiso de realizar reuniones periódicas
de esos ministros para atender las demandas
de los socios menores, como un intento
de saldar las discusiones sobre las asimetrías
entre los socios.
También, se espera que el Fondo
de Convergencia (FOCEM) colabore en la
convergencia estructural del bloque.
Asimismo, se aprobó la creación
del Observatorio para la Calidad Democrática
que apunta a dotar de transparencia los
actos electorales.
También, se aprobaron sendos acuerdos
comerciales con Cuba y Pakistán.
En otro orden, se aprobó la propuesta
por el Grupo de Alto Nivel de Empleo (Ganemple)
para la estrategia de crecimiento del
empleo.
En lo referente a la educación,
se fijó la estructura orgánica
del sector y se aprobó el mecanismo
para facilitar y garantizar la aplicación
del protocolo de integración educativa
y reconocimiento de certificados, títulos
y estudio a nivel primario y medio no
técnico.
Se prorrogó hasta mediados del
año próximo, el plazo para
que se negocie un régimen de bienes
informáticos y de telecomunicaciones.
Por úlitmo, es destacable la designación
de Argentina como sede permanente del
MERCOSUR Cultural.
Sobre los conflictos o diferencias bilaterales,
puede afirmarse que la Cumbre permitió
el acercamiento político entre
Bolivia y Chile. Dicha interpretación
nace a raíz de la aceptación
chilena de incluir en la agenda bilateral
la demanda boliviana de restitución
de una salida al mar. Así se desprende
de un comunicado de prensa conjunto que
se dio a conocer en la ciudad de La Paz,
luego de dos días de debates entre
las delegaciones técnicas.
Por su parte, la entrevista entre Evo
Morales y Luiz Inacio Lula da Silva giró
en torno al aumento del precio del gas
que Brasil compra a Bolivia. Hasta el
momento, las comisiones técnicas
de ambos países se han reunido
dos veces, pero sin logros relevantes.
Recordemos que Brasil compra 26 millones
de metros cúbicos diarios de gas
a Bolivia y paga cuatro dólares
por millón de unidades térmicas
británicas (BTU); mientras que
Argentina recibió un incremento
en el precio del gas que le compra a Bolivia,
por lo que actualmente paga cinco dólares
por cada millón de BTU.
Asimismo, tuvo lugar un breve encuentro
entre Kichner y Bachelet. Ambos mandatarios
trataron de solucionar las dificultades
surgidas por el aumento del precio del
gas natural que Argentina le vende a Chile
y el aumento en el precio del gasoil en
la frontera para los vehículos
provenientes de terceros países.
Esto es visto por Chile como discriminatorio.
El precio diferenciado comenzaría
a regir a partir del 15 de agosto como
una estrategia para evitar el contrabando
y respetar el nivel de abastecimiento
al interior del país. Para Chile,
la materia energética es de seguridad
nacional, dijo la presidenta Bachelet.
Además, espera que su país,
en dos años sea independiente en
materia energética.
También, el Presidente Kirchner
se reunió con su par uruguayo minutos
antes que éste pronunciara su mensaje
en la Cumbre. A pesar que en los últimos
meses han fracasado todos los intentos
de negociación, se acordó
seguir dialogando para solucionar el conflicto
de Fray Bentos.
Como balance de las relaciones entre los
miembros, Carlos “Chacho”
Álvarez expresó que los
conflictos bilaterales no han menoscabado
o hecho retroceder al MERCOSUR. Hay que
pensar que si la integración no
hubiera avanzado, estos problemas bilaterales
tal vez serían más hondos
e irresolubles.
Uno de los logros más significativos,
por lo que representa en el camino de
la consolidación del bloque, es
el reconocimiento de las diferencias internas
entre los países y el compromiso
explícito y público de superarlas
en el marco de la integración.
Tal vez, sean demasiado quince años
para estar en este punto, pero no se puede
desestimar que la integración en
este caso está signada por la exclusión
social y debilidad democrática.
Todo lo cual torna urgente los esfuerzos
en pos de una mayor equidad, no sólo
entre los socios sino entre los ciudadanos
del Mercosur.